El mundo del béisbol dominicano y las Grandes Ligas está de luto tras la partida de Ricardo Adolfo Jacobo Carty, conocido mundialmente como “Rico Carty”.
La noticia fue confirmada por su hija Ivette Carty, quien expresó el dolor de la familia en redes sociales. Rico había sido trasladado a Atlanta semanas atrás por complicaciones de salud.
Su fallecimiento ocurre poco tiempo después de la partida de Osvaldo Virgil, el primer dominicano en las Grandes Ligas, lo que resalta la pérdida reciente de dos pilares del béisbol nacional,
Fallecido a los 85 años en Atlanta, este inmortal del deporte dejó una huella imborrable tanto en el ámbito local como internacional. Su pérdida marca un capítulo doloroso para el béisbol, especialmente para República Dominicana, que pierde a uno de sus más grandes exponentes.
Nacido en San Pedro de Macorís, Rico Carty fue uno de los bateadores más temidos de su época. En una carrera de 15 años en las Grandes Ligas, dejó números impresionantes: 1,677 hits, 204 cuadrangulares, 890 carreras impulsadas y un promedio de bateo de .299.
Fue el primer dominicano en conquistar un título de bateo en la MLB, logrando un astronómico promedio de .366 con los Bravos de Atlanta en 1970. Su trayectoria incluyó pasos destacados por equipos como los Rangers de Texas, Cachorros de Chicago, Atléticos de Oakland, Indios de Cleveland y Azulejos de Toronto
En la Liga Dominicana de Béisbol Profesional (LIDOM), Carty brilló con las Estrellas Orientales, Tigres del Licey, Leones del Escogido y Águilas Cibaeñas. Fue un líder natural y un bateador de poder, acumulando 59 jonrones durante su carrera en LIDOM, un récord que se mantuvo durante décadas. En la temporada 1967-68 lideró el campeonato de bateo con un promedio de .350 y dejó su marca imborrable en la Serie del Caribe de 1977, donde conectó cinco cuadrangulares, estableciendo un récord aún recordado.
Carty no solo fue un jugador extraordinario, sino también una figura que inspiró generaciones. Su exaltación al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano en 1989 es testimonio de su grandeza y de la profunda admiración que le profesaban tanto fanáticos como compañeros de equipo. Los Tigres del Licey, con quienes logró campeonatos en 1977 y 1980, recordaron su impacto como uno de los mejores bateadores en la historia del club.
Los equipos de LIDOM como las Estrellas Orientales, Águilas Cibaeñas, Leones del Escogido y Tigres del Licey con quienes jugó, expresaron su pesar ante el fallecimiento de una figura legendaria. Las Estrellas lo describieron como una gran gloria del béisbol, mientras que las Águilas destacaron su contribución en la temporada 1973-74. Los Leones del Escogido lo consideraron un ícono nacional, y el Licey recordó sus mejores momentos vistiendo el uniforme azul.
El ministro de Deportes, Kelvin Cruz, también lamentó su partida: “Su partida deja un vacío irreparable en el deporte dominicano”. A estas muestras de solidaridad se sumaron miles de fanáticos que recordaron a Carty no solo por sus estadísticas, sino por el carisma y la pasión que transmitía dentro y fuera del terreno.
Rico Carty será recordado como una leyenda que trascendió las barreras del tiempo y el espacio. Su contribución al béisbol dominicano e internacional queda inmortalizada en cada estadio, en cada récord, y en el corazón de quienes presenciaron su grandeza. Su historia es un recordatorio de que las verdaderas leyendas nunca mueren, sino que viven en los ecos de su legado. Paz a su alma, Rico.
