Kenny Atkinson fue elegido Entrenador del Año de la NBA tras guiar a los Cleveland Cavaliers al mejor récord de la Conferencia Este y un inicio de temporada de 15-0, una de tres rachas de al menos 12 victorias que logró su equipo.
Superó en la votación a J.B. Bickerstaff, quien llevó a Detroit de los últimos lugares a los playoffs, y a Ime Udoka, que rompió la sequía de cinco años de Houston sin postemporada. Atkinson también obtuvo el reconocimiento de la Asociación Nacional de Entrenadores de Baloncesto, otorgado por sus colegas.
Recibió 59 de los 100 votos al primer lugar y apareció en 99 boletas, lo que le dio una ventaja amplia sobre Bickerstaff (31 votos) y Udoka (7).
Todos los finalistas habían recibido votos en años anteriores, pero este fue el mejor resultado de cada uno en sus respectivas trayectorias.