El dominicano José Ramírez recién el pasado sábado acaba de lograr otra proeza en su ya fecunda carrera en las Grandes Ligas:Materializó su tercera temporada con al menos 30 jonrones y 30 bases robadas, así como su cuarta con 30 o más vuelacercas.
Y ciertamente esto no sorprende, ya que su trayectoria ha sido sinónimo de consistencia. Se trata de un jugador que pese a sus 32 años de edad, aún se mantiene jugando a toda capacidad, con una producción admirable en términos ofensivos año tras año.
De hecho, no pocos estiman que a su retiro probablemente habrá roto gran parte de las marcas ofensivas de su equipo, Guardianes de Cleveland.
El nativo de Baní también sumó su estación número nueve con 30 o más dobles y su quinta con 100 vueltas anotadas.
Cuando ya la presente campaña casi concluye, Ramírez exhibe promedio de .285, con la cantidad de cuadrangulares señalados, tres triples y 31 dobles del total de 161 hits conectados, además de 81 carreras remolcadas, slugging de .506 y un OPS de .865,en los 152 partidos en que ha visto acción y 571 turnos agotados.
La presente no es una temporada de excepción para Ramírez, pues ya es costumbre en él terminar con ese tipo de producción e incluso en otras ocasiones ha puesto números muy por encima de los registrado en el presente año, algunas de las cuales su nombre ha terminado entre los primeros en la votación para el premio de Jugador Más Valioso.
En ese sentido, hay que citar las temporadas correspondientes al 2017 y el 2018 por sólo mencionar dos casos en particular.
En el 2017 el estelar antesalista concluyó con 29 jonrones, 107 anotadas y 83 impulsadas y un OPS de .957, mientras que al año siguiente despachó 39 batazos de cuatro esquinas, 110 anotadas y 105 remolcadas, con un OPS de .939.
De por vida, en sus 13 años en liga grande, el modesto jugador quisqueyano, quien ha sido convocado siete veces al Juego de Estrellas, batea para .279 de promedio, con 285 jonrones, 998 anotadas y 995 remolcadas, un OBP de .353, .509 de slugging y .857 de OPS.
Aún asi, Ramírez no recibe el crédito que merece. Es decir la proyección ni la trascendencia que un jugador de su estirpe amerita por parte de la prensa estadounidense.
A lo mejor esto ocurra por el hecho del tipo de personalidad introvertida que posee el dominicano, quien por lo regular prefiere hablar con su bate y mantenerse en una especie de “perfil bajo” todo el tiempo.
Además, hay que tomar en cuenta que el equipo y el mercado al que pertenece no es igual que, por ejemplo, al de Nueva York, en donde cualquier tipo de proeza notable y significativa que haga un jugador determinado suele resaltarse a niveles supremos.
Sin embargo, esta falta de valoración no debe restar a la carrera que ha desarrollado José Ramírez, quien de mantenerse como hasta ahora, con el nivel productivo que ha exhibido en el tiempo que lleva en las Mayores, en cuyo trayecto inclusive ha mostrado una defensa por encima del promedio, es posible que al final, sea valorado en su justa medida y se le otorgue el sitial que le corresponde llevándolo al Salón de la Fama de Cooperstown, posibilidad ésta que no debería descartarse. De ser así, se haría justicia.PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES:En su carrera como dirigente, el dominicano Felipe Rojas Alou logró mil 33 victorias y como jugador conectó dos mil 101 hits.!Suena la campana! ¡Climmps!
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José Ramírez
