En una jornada de alto voltaje, Cincinnati Reds y New York Mets estiraron la puja por el último cupo de comodín de la Liga Nacional hasta el día final de la temporada regular. En Milwaukee, los Reds firmaron un triunfo clave 7-4 sobre los Brewers, apuntalados por un racimo de seis carreras en el tercer episodio que les dio el control del juego. Andrew Abbott se apuntó la victoria y el club de Ohio llegó a la meta con paso firme: ocho triunfos en sus últimos diez.
En Miami, los Mets respondieron con autoridad para seguir con vida. Pete Alonso abrió el camino con un doble impulsor en el primer inning y añadió su jonrón 38 en el tercero, mientras Clay Holmes firmaba una apertura de calidad: 6.0 entradas, un hit, tres boletos y un ponche. El bullpen—Brooks Raley, Tyler Rogers y Edwin Díaz—cerró la puerta para sellar la blanqueada 5-0 ante los Marlins.
Con estas victorias, ambos amanecen 83-78, pero el contexto favorece a Cincinnati: los Reds tienen el desempate directo sobre Nueva York (4-2 en la serie particular). Así, el cuadro de David Bell controla su destino. “Tener cada juego con este significado es un regalo”, había dicho el cerrador Emilio Pagán tras el 7-4 en Milwaukee, reflejando el pulso interno de un equipo que viene encendido en la recta final.
El mapa de clasificación es simple y a la vez implacable. Cincinnati entra con una victoria en Milwaukee o con una derrota de los Mets en Miami. Nueva York solo accede si gana en el loanDepot park y los Reds caen en el American Family Field. La moneda, en definitiva, está en el aire, pero el peso del desempate hace que la presión extra recaiga en los de Queens.
Para el cierre dominical, el duelo en Milwaukee ofrece calibre de octubre: Brady Singer (14-11, 3.95) por Cincinnati frente al All-Star Freddy Peralta (17-6, 2.68) por los Brewers. En Miami, los Mets confían en Sean Manaea (2-4, 5.80) ante el eléctrico Edward Cabrera (7-7, 3.66), capaz de dominar con poder de recta y cambio cuando está en la zona.
El telón se baja hoy con dos plazas, dos ciudades y una sola llave hacia octubre. Quien dé el último golpe viajará a Los Ángeles para medirse a los Dodgers, campeones defensores, el martes en la Serie de Comodines. Para los Reds, sería la confirmación de un cierre ardiente; para los Mets, la prueba definitiva de supervivencia tras haber soltado el liderato que llegaron a ostentar en junio. Ahora, todo se resume a 27 outs.