La jornada en el mundo de las Grandes Ligas dejó noticias fuertes en todos los frentes: premios individuales, cambios en los dugouts, movimientos de roster y el regreso de una leyenda a la organización que lo vio levantar trofeos.En Oakland, el primera base de los Athletics, Nick Kurtz, se convirtió en Novato del Año de la Liga Americana por decisión unánime, un logro reservado para pocas figuras. Es apenas el segundo jugador en la historia de la franquicia en ganar el premio con unanimidad, después de Mark McGwire en 1987. Detrás de él quedó su compañero Jacob Wilson, mientras que el jardinero de los Medias Rojas, Roman Anthony, terminó tercero en la votación. No es algo común que dos compañeros de equipo terminen primero y segundo en esta carrera; en la Americana no pasaba desde que Alvin Davis y Mark Langston lo hicieron con los Marineros en 1984. Kurtz, de 22 años, habló de lo especial que es que su nombre aparezca junto al de grandes figuras que han ganado ese reconocimiento y destacó que compartir el podio con Wilson refleja el tipo de relación que tienen: dos compañeros que se exigen y se ayudan mutuamente para mejorar.
En la Liga Nacional, el premio de Novato del Año fue para el receptor de los Atlanta Braves, Drake Baldwin, completando así una noche dominada por el talento joven. Mientras Kurtz ponía la nota de poder ofensivo en la Americana, Baldwin se consolidaba como una nueva pieza clave detrás del plato para una organización acostumbrada a desarrollar estrellas.
En la costa oeste, los reflectores se movieron a San Diego, donde los Padres presentaron a Craig Stammen como su nuevo mánager. La decisión sorprendió a muchos, ya que Stammen, de 41 años, no tiene experiencia previa
como coach ni como dirigente en ningún nivel. Sin embargo, el gerente general A.J. Preller confía en que los años de Stammen dentro de la organización —está ligado a los Padres desde 2017—, su conocimiento del clubhouse y su reputación como líder compensan esa falta de recorrido en el banquillo. Stammen pasó de participar en las entrevistas a otros candidatos a convertirse él mismo en la opción elegida. Toma el relevo de Mike Shildt, quien se retiró el 13 de octubre alegando agotamiento, apenas dos semanas después de que San Diego fuera eliminado en la ronda de comodines por los Chicago Cubs. Tras una lesión de hombro en la primavera de 2023 que puso fin a su carrera como lanzador, Stammen se incorporó como asistente del cuerpo técnico y del departamento de operaciones de béisbol, mientras equilibraba sus nuevas funciones con la vida familiar junto a su esposa Audrey y sus cuatro hijos en Ohio. Ahora tendrá la responsabilidad de conducir a un equipo que ha llegado a la postemporada en cuatro de las últimas seis temporadas y que cuenta con figuras de alto impacto como Fernando Tatis Jr. y Manny Machado.
En el centro del país también hubo movimiento. Los Kansas City Royals adquirieron al jardinero Kameron Misner desde los Tampa Bay Rays, a cambio de un jugador a ser nombrado más adelante o consideraciones en efectivo. Misner, de 27 años, inició 57 juegos y apareció en 71 con los Rays la campaña pasada, dejando promedio de .213, con cinco cuadrangulares y 22 carreras impulsadas en 217 apariciones al plato, antes de ser puesto en asignación la semana anterior. El movimiento tiene sabor local: Misner creció en Poplar Bluff, Missouri, en la esquina sureste del estado, y jugó béisbol universitario en la Universidad de Missouri, a solo un par de horas del Kauffman Stadium. Fue selección de primera ronda de los Miami Marlins en el draft de 2019 y viene de ser elegido MVP de Triple A Durham tras una temporada 2024 en la que bateó para .248, con 17 jonrones y 30 bases robadas, credenciales que lo convierten en una apuesta interesante para reforzar los jardines de Kansas City.
Mientras tanto, en San Francisco, la noticia fue el regreso de una figura histórica: Bruce Bochy vuelve a los Giants, ahora como asesor especial tanto en el área de béisbol como en la parte de negocios de la organización. El presidente de operaciones de béisbol, Buster Posey, recurre a su antiguo mánager para ayudar a marcar el rumbo de una franquicia que acumula cuatro campañas consecutivas sin avanzar a la postemporada. Hace apenas unas semanas, los Giants habían apostado por el coach universitario de Tennessee, Tony Vitello, para su primera experiencia en el béisbol profesional, y Bochy será una voz experimentada y de confianza para este nuevo cuerpo técnico. A sus 70 años, Bochy conoce como pocos la organización: guió a San Francisco a las Series Mundiales de 2010, 2012 y 2014, incluyendo el primer título desde que la franquicia se mudó a la Costa Oeste en 1958. Más recientemente dirigió a los Texas Rangers, con quienes conquistó el campeonato de 2023 antes de separarse del club. Ahora, el veterano estratega expresó su entusiasmo por reencontrarse con la ciudad y la organización que marcaron su carrera y aseguró que está dispuesto a aportar en todo lo que pueda.
Entre premios para jóvenes estrellas, apuestas arriesgadas en los banquillos, movimientos de piezas con potencial y el regreso de una leyenda al lugar donde construyó su legado, “Lo ultimo en grandes ligas” deja claro que el béisbol sigue en constante movimiento, mezclando presente, futuro y nostalgia en un mismo día de noticias.

