El futuro suele ser impredecible y el deporte no escapa a esta apreciación.
La introducción viene a colación por lo que ha ocurrido en el joven torneo de béisbol invernal dominicano.
Y es que nadie esperaba que las Aguilas Cibaeñas cuando ya se ha jugado casi la mitad de la serie regular, esté en el lugar en que está ni que tuviera el impresionante desempeño que ha mostrado hasta ahora.
Ciertamente, cuando se habla del actual certamen beisbolero tanto cronistas como fanáticos hacen referencia a “las Aguilas y los demás” en franca alusión al dominio que ha tenido el conjunto cibaeño con relación a los otros cinco conjuntos que conforman la Liga Dominicana de Béisbol y la labor que, en sentido general, ha desempeñado. Es decir, apartan al club amarillo del grupo.
Sin tomar en cuenta el juego de anoche ante los Gigantes –esto se escribe antes-, la escuadra local exhibía récord de 20-4, prácticamente tocando las puertas de la clasificación a la ronda semifinal o Round Robin.
Es una marca tan exitosa que podría decirse era “impensable” antes de iniciar la presente justa.
El Licey…
En la “acera contraria”, se colocan los Tigres del Licey, quienes han tenido hasta el momento una temporada que bien podría considerarse para el olvido.
En efecto, el equipo azul tiene una estructuración que no es para cosechar los resultados que ha tenido en lo que va de campaña.
De hecho, tampoco nadie supuso antes de iniciar el premio invernal que los escarlatas estarían hoy día en la última posición del standing.
Su foja es de 9-16 –sin el partido de anoche ante los Toros, a 11 juegos y medio de la primera posición y ha sido el equipo que peor béisbol ha estado jugando.
Incluso muchos de los partidos en que ha comenzado ganando o ha venido de atrás o logrado empatar, los ha perdido.Su ofensiva ha estado muy pobre, básicamente su bateo oportuno, ya que en múltiples ocasiones han dejado muchos hombres en posición anotadora (su bateo colectivo es de .248, apenas ha producido 65 carreras en 18 partidos y 606 turnos agotados, con un OBP de .337, slugging de .333 y OPS de .670).
Cabe señalar que sus muchos parciales han comenzado a preocuparse por la situación y no desperdician oportunidades para reclamar a la gerencia del equipo que tome medidas urgentes, en interés de parar el mal momento que experimenta la escuadra capitalina.
Y que conste, su gerente general y vicepresidente de Operaciones, Audo Vicente ha comenzado a tomar decisiones al respecto. Recién despidió al mejor cerrador de la historia en la pelota criolla Jairo Asencio, al experimentado lanzador, Lisalberto Bonilla y a su coach Anderson Hernández.
Además, acaba de salir de los servicios de su coordinador de ofensiva, el venezolano Luis Varela, lo mismo que de los lanzadores Ryan Watson y Paolo Espino, a quienes supuestamente se les habían concluido sus contratos de trabajo.
No obstante, hasta ahora nada ha dado resultado, mientras los aficionados de los azules están al grito.
Habrá que esperar no obstante, una reacción de los Bengaleses, franquicia a la que el tiempo cada vez se le hace más corto. La realidad, empero, es que pocos o nadie esperaba un comienzo tan negativo de los gloriosos Tigres del Licey. ¿Qué opina usted…? PARA QUE LO APRENDAS O LO RECUERDES: Aún cuando tiene en su haber muchos récords positivos, Rafael –El Gallo- Batista, Estrellas Orientales,también tiene en su poder el negativo renglón de ponches recibidos con un total de 529 en su carrera. ¡Suena la campana! ¡Climmp!
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Luis –Pipe-Urueta, dirigente de las Aguilas Cibaeñas. Foto fuente externa.
