BOSTON (AP) — El relevista de los Houston Astros, Héctor Neris, utilizó un balk (movimiento ilegal) de manera intencional para avanzar a un corredor a tercera base este sábado, y posteriormente tuvo un intercambio verbal con el coach de tercera base de los Red Sox, Kyle Hudson, lo que provocó un conato de enfrentamiento entre ambos equipos.
Neris permitió un doble remolcador con dos outs de Trevor Story en el séptimo episodio de la derrota 7-3 de Houston. Luego realizó un balk, moviendo a Story a tercera, antes de que Carlos Narváez conectara un rodado al campocorto para el out final.
Mientras se retiraba del montículo, Neris intercambió palabras con Hudson y gritó hacia el dugout de los Red Sox, lo que motivó que jugadores de ambos equipos, incluyendo los bullpens, salieran al terreno antes de que el orden fuera rápidamente restablecido.
Al ser preguntado si pensaba que los Red Sox estaban robando señas, Neris respondió: “Tal vez. Tal vez sí, tal vez no”.
“Pero igual quería concentrarme”, continuó el derecho de 36 años. “En esa situación, quise hacer lo que sentía en el momento. Por eso lo moví a tercera”.
Neris se negó a especificar qué fue lo que le dijo a Hudson que provocó que se vaciaran las bancas.
“Nada. Es parte del juego”, dijo con una sonrisa. “Algo gracioso. Algunos vienen (al clubhouse) queriendo saber qué pasó, pero no fue nada serio”.
El dirigente de los Astros, Joe Espada, habló con los medios antes que Neris, y dijo no tener detalles sobre lo ocurrido.
“De hecho, voy a preguntarle a Neris”, comentó. “Realmente no sé qué palabras se intercambiaron, para serte honesto”.