SANTO DOMINGO. Cuando Francisco Cordero hizo su primera aparición en Las Mayores a los 27 años de edad, probablemente no imaginó que se trataba del inicio de una carrera repleta de hitos.
Mucho menos, que ese 2 de agosto de 1999 sería el punto de partida hacia un estrellato que este año lo catapultará a la gloria del deporte nacional.
Y la gloria para Cordero llegará el próximo domingo 13 de noviembre durante el 56 Ceremonial de Exaltación del Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano cuando se convierta en uno de los exaltados de la Clase 2022.
Así lo comunicó hoy el Comité Ejecutivo del Pabellón de la Fama, por medio de su presidente Dionisio Guzmán, a través de su departamento de prensa.
“Francisco ha sido elegido para la inmortalidad. Es el quinto deportista que recibe la distinción en este proceso de selección”, indicó Guzmán, quien recordó las recientes escogencias del otrora lanzador zurdo Efraín Valdez, Francisco García, en baloncesto y de los propulsores Fernando Teruel, ex técnico de la selección nacional de baloncesto y Héctor J. Cruz, notable periodista y bibliógrafo deportivo. Cruz es editor deportivo del Listín Diario.
Guzmán expresó que la elección de Cordero recayó sobre los miembros de la crónica deportiva de todo el país, “que cada año tienen la sagrada e importante misión de votar a dos futuros inmortales”. Ya los cronistas habían seleccionado a García.
Líder de salvados
Cordero es un ex lanzador derecho nativo de Santo Domingo que debutó en las Grandes Ligas el 2 de agosto de 1999 con los Tigres de Detroit. Su ruta hacia el estrellato la inició en los Rangers de Texas y se extendió por Milwaukee y Cincinnati.
Nació el 11 de mayo de 1975 en el sector capitalino de Arroyo Hondo.
Pese a debutar a la edad de 27 años, Francisco perduró lo suficiente como para terminar como el más grande relevista dominicano de todos los tiempos.
Sus 329 rescates en 14 temporadas no dejan lugar a dudas, a pesar de que su estrellato llegó seis años después de aquel debut exitoso de 1999 contra los Medias Blancas de Chicago.
Cordero tuvo apenas 25 salvamentos en sus primeras cinco temporadas, después de haber relevado en 191 partidos.
Desde ese entonces, el diestro salvó 304 encuentros en nueve temporadas, para un promedio de 33.7 por campaña.
Aunque nunca fue líder en salvamentos, Francisco Javier Cordero tuvo siete temporadas de más de 30 rescates, incluyendo tres de 40 o más.
Tuvo una cifra tope de 49 en la campaña de 2004 cuando vio acción en 67 partidos con Texas. Ese año ganó tres y perdió cuatro, con 2.13 de efectividad en 71.2 de entradas lanzadas. Permitió 60 hits y ponchó a 79, con 32 bases por bolas.
Cordero cerró 37 juegos con éxito en 2005, 44 en 2007, 34 en 08, así como 39, 40 y 37 entre el 2009 y 2011.
Su récord de victorias y derrotas fue de 47-53 y la efectividad colectiva de 3.38. Tiró 824.2 tercios de innings, permitió 751 imparables, 342 anotaciones (310 limpias), con 796 ponches propinados y 375 boletos otorgados. La oposición le bateó para .244 de promedio, tuvo un WHIP de 1.365 y un WAR de 16.9.
La mayor cantidad de episodios lanzados por Cordero fueron los 82.2 del 2003, su cifra tope de ponches los 90 conseguidos en esta misma temporada, menor cantidad de hit en una campaña de 50 o más entradas de labor, los 49 del 2011 en 69.2 episodios.
Asimismo, su mejor récord en triunfos y derrotas fue el de 10-5 que tuvo en 2006.
En 2004 fue galardonado por los Rancheros como “Lanzador del Año”, distinciones que también obtuvo en 2006 y 2007 con los Cerveceros de Milwaukee. Participó en los Juegos de Estrellas de 2004, 07 y 09.
El de Santo Domingo trabajó como relevista en 575 partidos y en su carrera nunca inició un juego en liga mayor.
No se avizora que Cordero podrá ser desplazado en los años por venir como el rey del salvamento entre los dominicanos.
Escoltan a Francisco Cordero, Fernando Rodney, 327; el inmortal del Pabellón de la Fama José Mesa, quien salvó 321; Armando Benítez, 289; José Valverde, 288; Rafael Soriano, 207; Santiago Casilla, 143; Antonio Alfonseca tuvo 129, Melquíades Rojas 126 y Carlos Mármol 117. Todos están retirados o fuera de las Grandes Ligas.
En el béisbol profesional dominicano Cordero jugó para los Leones del Escogido.
