SANTO DOMINGO – Los Tigres del Licey ofrecieron un espectáculo ofensivo sin precedentes al derrotar 25-3 a las Águilas Cibaeñas en el Estadio Quisqueya Juan Marichal, en un partido que quedó inscrito en los libros de historia de la Liga de Béisbol Profesional de la República Dominicana (LIDOM).
Con una descomunal producción de 27 imparables, los bengaleses impusieron un récord de carreras anotadas en la historia de la liga, superando las 24 producidas por los Leones del Escogido el 7 de noviembre de 1957. Según el historiador Tony Grullón, este encuentro también marcó la tercera mayor cantidad de hits registrados en un solo juego en la LIDOM.
Con esta victoria, los Tigres (24-19) escalan al segundo lugar de la tabla, superando a las Águilas (24-20) por medio juego y extendiendo su racha ganadora a tres partidos consecutivos.
Dominio total
El Licey aseguró el partido temprano, anotando cinco carreras en la primera entrada, lideradas por un jonrón de Dawel Lugo y el poder ofensivo de David Hensley y Emilio Bonifacio, quienes conectaron cuatro imparables cada uno. El ataque ofensivo alcanzó su clímax en la octava entrada, cuando los azules anotaron 12 carreras, sellando una victoria humillante para las Águilas.
Protagonistas del Licey a la ofensiva fueron David Hensley: 4 de 5, con dos dobles, tres remolcadas y cuatro carreras anotadas.,Emilio Bonifacio: 4 de 5, con una anotada y una base robada. Jorge Alfaro: 3 de 6, lideró con cinco carreras impulsadas, Robel García: Jonrón, sencillo y tres remolcadas en dos turnos.
Pitcheo sólido y relevistas impecables vontó con el abridor Radhamés Liz trabajó 3.2 entradas permitiendo solo una carrera, mientras los relevistas Ulises Joaquín, Andrew Pérez, Yunior Marte, Gerald Ogando y Armando Vásquez limitaron a las Águilas a solo tres imparables en el resto del partido.
Por las Águilas
El equipo cibaeño tuvo una noche para el olvido. Solo Yefry Pérez, con un jonrón de dos carreras, y Anthony García, con dos dobles, lograron destacarse ofensivamente. El abridor Braulio Torres-Pérez fue castigado sin lograr sacar un out, permitiendo cinco carreras y marcando el inicio de una debacle para el cuerpo de lanzadores aguilucho.
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