OKLAHOMA CITY (AP) — El normalmente impasible Shai Gilgeous-Alexander fue captado sonriendo por las cámaras tras la derrota en el Juego 3 en Denver, que puso a Oklahoma City abajo 2-1 en las semifinales de la Conferencia Oeste.
El finalista al premio MVP de los Thunder pasó el resto de la serie mostrando la razón de esa sonrisa. Promedió 30.8 puntos con un 55.8% de efectividad en tiros de campo en los siguientes cuatro partidos, de los cuales Oklahoma City ganó tres para avanzar a la final de conferencia.
Gilgeous-Alexander explicó que la sonrisa fue una respuesta a los fanáticos que lo estaban provocando.
“Es fácil burlarse cuando estás arriba”, dijo Gilgeous-Alexander tras el Juego 3. “Nunca quiero mostrarles que estoy derrotado, enojado ni nada por el estilo. Nada está escrito. La serie no ha terminado y tenemos mucho por lo que ser optimistas”.
Respaldó esas palabras anotando 25 puntos en la victoria del Juego 4, 31 en el triunfo del Juego 5, 32 en la derrota del Juego 6 y 35 en la paliza 125-93 del Juego 7 el domingo.
Los Thunder recibirán a los Minnesota Timberwolves en las finales de la Conferencia Oeste a partir del martes.
El finalista al MVP de Oklahoma City se está sintiendo cada vez más cómodo expresándose. Durante años, la estrella canadiense ha trabajado para mantenerse sereno, pero admitió que estaba tenso antes del Juego 7. Quería que los 68 triunfos que hicieron de los Thunder el mejor equipo de la temporada regular tuvieran un verdadero significado. La campaña anterior, Oklahoma City había sido eliminado en las semifinales del Oeste tras ser el sembrado número uno. Y esta vez, tenía que enfrentarse nuevamente a otro finalista al MVP: Nikola Jokic.