LOS ÁNGELES (AP) — Un descamisado Bryce Harper se vació una botella de champaña sobre la cabeza, celebrando el segundo título consecutivo del Este de la Liga Nacional para los Philadelphia Phillies.
Kyle Schwarber festejó bebiendo cerveza a través de una manguera mientras sus compañeros alimentaban la improvisada fuente en medio del clubhouse visitante oscurecido, luego de que los Phillies remontaran para una vibrante victoria 6-5 en 10 entradas sobre los Dodgers de Los Ángeles el lunes por la noche.
“Hay que disfrutar esto”, dijo Schwarber después, con un grueso cigarro entre los labios. “Esto no pasa todo el tiempo”.
Los Phillies esperan que la fiesta continúe hasta octubre, cuando buscarán la tercera corona de Serie Mundial en la historia de la franquicia y la primera desde 2008.
“Estamos jugando un muy buen béisbol en este momento y tenemos que seguir adelante entendiendo que hay un objetivo mayor”, expresó Harper. “Tenemos en mente cosas que queremos ganar”.
El aporte de Luzardo
El abridor dominicano Jesús Luzardo se reivindicó tras un inicio titubeante y brilló en la lomita con 10 ponches, controlando la ofensiva de los Dodgers durante la mayor parte del encuentro. Su actuación fue clave para mantener a Filadelfia en la pelea y permitir que la ofensiva reaccionara en la parte final del juego.
El renacer de Buehler
La noche también marcó el regreso de Walker Buehler, ahora con el uniforme de los Phillies, quien aprovechó su segunda oportunidad en Grandes Ligas para mostrar solidez desde el bullpen y aportar entradas de calidad en un momento crucial.
Remontada oportuna
Philadelphia apenas había conectado un imparable —el jonrón 53 de Schwarber— hasta la séptima entrada. Pero entonces Weston Wilson y Harper también se volaron la cerca, encabezando la reacción frente a los campeones defensores de la Serie Mundial.
“Son duros y resistentes”, destacó el mánager Rob Thomson. “Siguen peleando y estoy orgulloso de ellos. Este es un grupo realmente especial”.
Después de que Max Muncy rodó al final para los Dodgers, los Phillies se reunieron cerca del montículo para celebrar. Posaron para una foto en el terreno mientras los fanáticos vestidos de rojo aplaudían detrás de su dugout en el Dodger Stadium.